Guía práctica con pasos clave, datos relevantes y cómo Food Partners acompaña el camino a la certificación
Cumplir con los estándares internacionales de seguridad alimentaria no solo es un requisito para exportar, sino una herramienta clave para mejorar procesos internos, reducir riesgos y fortalecer la confianza del mercado.
📊 Dato clave: Según la FAO, más de 600 millones de personas se enferman cada año por alimentos contaminados. Las normas como BRCGS, IFS o FSSC 22000 buscan prevenir estos riesgos desde la raíz.
Estas son algunas claves fundamentales para avanzar hacia una certificación reconocida internacionalmente:
Implementar un sistema permite identificar peligros, establecer controles y monitorear cada etapa de la producción.
Sin personas capacitadas no hay sistema sólido. La formación en BPM, HACCP y cultura de inocuidad es esencial.
Detectar desvíos a tiempo y actuar sobre las causas es un hábito clave para sostener la calidad.
Una pequeña planta láctea que abastecía al mercado local decidió escalar su producción para exportar. Al contactarse con Food Partners, se identificaron las siguientes necesidades:
Se propuso un plan dividido en tres etapas:
Resultado: En 6 meses lograron la certificación IFS y accedieron a una nueva cadena de supermercados como cliente. Además, mejoraron su eficiencia operativa y redujeron reclamos por calidad.
En Food Partners acompañamos a empresas alimentarias en el diseño e implementación de sistemas de inocuidad. Nuestro diferencial está en el enfoque técnico y personalizado, que adapta los estándares a la realidad operativa de cada planta.
Desde diagnósticos hasta simulacros de auditoría, somos aliados estratégicos para que logres cumplir —y sostener— tus certificaciones internacionales.